6 de Marzo de 2013
Padecer
intensos dolores en las inserciones musculares ante pequeños movimientos, e
incluso frente a estímulos tan normales como el roce de la ropa, forman parte
de sus características. La anomalía afecta en proporción de 9 a 20 mujeres por
cada 1 hombre.
por El Mostrador
Ha
llegado marzo y con él, muchas responsabilidades y preocupaciones forman parte
del panorama que las personas deben enfrentar. A raíz del estrés que puede
generar este período, la desconocida fibromialgia puede volverse una enfermedad
frecuente. Hablamos de una anomalía capaz de producir dolores prácticamente
incapacitantes en distintas zonas del cuerpo, que afecta mayoritariamente a
mujeres.
Con la idea de
aportar información respecto de esta patología, la reumatóloga de Clínica
Vespucio Dra. Paula Pozo, señala algunas de sus características, e indica
ciertas recomendaciones para prevenirla.
Los síntomas
que llevan a su diagnóstico incluyen dolores generalizados y dolor y rigidez en
las articulaciones y los músculos. “El tipo de dolor puede variar, siendo mayor
a lo habitual y frente a estímulos normales e inocuos como ante el tacto y el
roce de la ropa, habitualmente afectando áreas en donde los tendones insertan a
los músculos en los huesos, detalla la especialista.
Algunos de los
síntomas más frecuentes de la fibromialgia son:
-Dolores
generalizados de duración mayor a tres meses.
-Fatiga y sueño
no reparador incapaz de proporcionar descanso.
-Rigidez
matutina.
-Puntos de
dolor en el cuerpo, generalmente en los sitios de inserciones musculares.
-Problemas
relacionados como dolor de cabeza, síndrome de colon irritable, dolor pélvico y
alteraciones del sueño y fatiga.
Se trata de una
anomalía compleja, debido a que no existen pruebas de laboratorio que puedan
ayudar a establecer su diagnóstico y por ello el médico debe hacerlo tras
considerar otras causas de los síntomas y a través del análisis de la historia
clínica del paciente. “En la mayoría de los casos el trastorno es de curso
crónico y raramente desaparece en forma espontánea”, destaca.
Aunque no existe explicación científica del por qué
la anomalía afecta más a las mujeres, la proporción de personas que pueden
padecer fibromialgia es notoriamente femenina (9 a 20 mujeres por cada 1 hombre).
La tensión
emocional y el estrés pueden aumentar la probabilidad de padecerla. Durante las
situaciones de crisis de fibromialgia, que pueden durar entre 12 y 72 horas,
“las personas pueden llegar a sentir dolor ante los movimientos más pequeños,
sin que pueda levantarse ni moverse sintiendo todo el cuerpo intensamente
adolorido”, explica.
Según la
reumatóloga de Clínica Vespucio, algunos consejos pueden ayudar a prevenir su
aparición:
-Ajuste su
ritmo de actividades disminuyendo el estrés y evitando largas horas de
actividad repetitiva. Intente desarrollar una rutina que alterne el trabajo con
el descanso.
-Realice un
programa de ejercicio de bajo impacto (caminar, andar en bicicleta y nadar)
además de variados ejercicios de estiramiento. Mejore la postura fortaleciendo
los músculos de soporte, en especial los abdominales.
-Mejore su
sueño a través de actividad física a diario.
-Utilice
técnicas de relajación como masajes y baños calientes.
(Imagen
seleccionada de la Web)